Si Hubieras Querido... OneShot (Sichul)

Título del Songfic: Si Hubieras Querido

Parejas: SiChul

Songfic

Tipo: Yaoi

Género: slash, drama, romance, OTP, POV, AU

Clasificación: +18

Nadie dijo que era fácil despedirnos

Ni siquiera sé si puedo ser tu amigo…

Siempre lo supe. No puedo engañarme a mí mismo y decir que ésto ha sido una sorpresa para mí, y que siempre creí que existiría un “para siempre”.

No es así. Siempre lo supe. 

Desde el primer momento en que puse mis ojos en tí. Desde el primer momento en que tu mirada se cruzó con la mía, lo supe. No habría un final feliz. 

Aún así duele. Duele verte caminar por ese pasillo. Con tu traje negro, tan pulcro y elegante. 

Realmente no sé que estoy haciendo aquí. Quise darme el valor de verte, pero ahora me doy cuenta de que no soy tan valiente. 

Nuestras miradas se han cruzado de nuevo. Puedo ver en tus ojos que no estás dudando ni un segundo, porqué así debe ser. Pero tampoco veo la felicidad que tanto me has dicho que has encontrado; y es ahí en donde debo ser yo quien intente ser congruente. 

No podemos ser amigos. No después de toda nuestra historia. No después de nuestro final...

Mira si nos hemos querido

¿Cuántos universos hemos inventado?

¿Cuántas vueltas a este cuento le hemos dado?

Y mira lo que nos ha pasado

Observo unos segundos tu espalda frente a ese altar. Junto a ella. Cierro los ojos y suspiro hondo antes de darme la vuelta y caminar por el largo pasillo que antes has pisado, para salir de ahí. 

Puedo escuchar murmullos a mi alrededor, algunos amigos que dicen mi nombre, asombrados por verme salir antes de que siquiera la ceremonia comience. 

Acelero mis pasos recordando ese primer día… 

— Así que, ¿eres Heechul? - escucho que alguien dice mi nombre. 

Dejo a un lado el bolígrafo con el cual estaba intentando terminar mi tarea de álgebra. Levanto mi rostro mientras retiro un mechón de mi rostro para poder ver a la persona. 

— Sí. - contesto. — ¿Quién eres? - pregunto al chico parado frente a mí. 

— Siwon. - me dice mientras extiende su mano hacia mí. — Kibum me ha hablado de tí. - ladeo mi cabeza, observándolo, sin tomar su mano. 

— ¿En serio? ¿Sobre qué? - pregunto intrigado. 

Debo admitir que tener al chico más popular de la escuela, parado frente a mí, con su mano extendida se siente bien. Puedo sentir las miradas de todos mis compañeros de salón. Y aún mejor, puedo escuchar a algunas chicas murmurando. 

¡¿Cómo me atrevo a dejar al chico más guapo de la escuela con su mano extendida?!

— Bueno…- abro los ojos muy sorprendido cuando arrastra un pupitre, lo pone frente a mí y se sienta. Su rostro muy cerca del mío. — En realidad estoy mintiendo. - frunzo el ceño. 

— ¿Cómo? - de pronto no entiendo qué está pasando. 

— Sólo dije el nombre de tu amigo para que hablaras conmigo. - Siwon sonríe sin dejar de verme fijamente. — En realidad llevo días observándote, y me tienes intrigado. 

— ¿Intrigado? ¿Yo? 

— Sí. - sigue sonriendo… demasiado. 

Debo admitir que sí, Siwon es el chico más guapo de la escuela, y cuando sonríe de esa forma, realmente hace que sienta cosquilleos en la piel. 

— Me intriga saber si te gustan los chocolates. - me dice, y eso realmente me tiene sorprendido. ¿De que habla? 

— Yyo…

— Así que decidí comprarte uno, y ver si te gustan. - saca una barra y la pone en mi pupitre. 

— ¿Uh? - veo el  chocolate y de nuevo a Siwon. De pronto siento que mis mejillas se calientan.

— Bueno, fue un placer charlar contigo Heechul. - Siwon se pone de pie. — Disfrútalo. 

Y así sin más, Siwon se alejó, dejándome con el corazón latiendo a mil por hora, y mis mejillas realmente calientes. 

Voltee a ver a mi alrededor. Todos estaban observándome, y yo me sentía demasiado alagado, el chico más guapo de la escuela había venido hasta mí, solo para regalarme un chocolate. Llamenme loco, pero yo sabía que él estaba intentando coquetear conmigo. 

Pero tan pronto salí al descanso, caí en cuenta de que si él estaba coqueteando conmigo, al final, ese día o en unos años, las cosas tendrían que seguir su rumbo “correcto”, el que  la sociedad nos dice. 

Siwon estaba rodeado de varias chicas, todas muy lindas, y él se veía tan bien con ellas. Se veía correcto, como debía ser.

No merecen nuestros labios tanto daño

¿Quién diría que en un día mueren años?

¿De quién te has enamorado?

Si todo lo que soy nunca te ha gustado

Teníamos destino yendo separados

Ya lo veo claro

— Estoy saliendo con alguien. 

Cerré  el libro que estaba leyendo, aquel que me regalo por mi cumpleaños. Respire hondo, intentando controlar mis emociones antes de levantar la mirada y verlo a la cara. 

— Quería decírtelo yo mismo antes de que alguien más lo hiciera. - no digo nada, sólo asiento mientras lo escucho. — Hemos estado saliendo unas semanas, la conocí en la empresa. - sonrío al escuchar eso — intenté ignorarla, pero… 

— Entiendo. - le digo. 

— ¿Sólo eso vas a decir? - Siwon parece molesto por mi reacción. 

Pero ¿qué más puedo hacer o decir? Sabía que llegaría el día en que ésto sucediera. 

— ¿Quieres que llore y te pida que no me dejes? 

— Heechul. 

— Lo entiendo Siwon. Sabía que éste día llegaría. - le digo. — Sabía que tarde o temprano tendrías que sentar cabeza, casarte y seguir adelante con tu vida…

— ¡Odio que hables de esa forma! - Siwon grita. — ¡Siempre has sido más maduro que yo, no es así! 

— No es eso. - respiro hondo. — Es sólo que…

— ¿Sabes? Eres irritante, simplemente no entiendo qué fue lo que ví en tí en primer lugar. - me quedo callado al escucharlo decir eso. 

Me ha dolido, pero tal vez sea mejor así. El momento de abrir los ojos y dejar de soñar ha llegado. 

— Ella es tan diferente a tí. No discute por todo, me cuida, y sé que me ama tanto como yo a ella. — Cierro los ojos un momento. 

— Yo te amo…- murmuro. Escucho a Siwon bufar.

— Sí. Tanto que has pasado años esperando éste momento, ¿no es así? 

Abro los ojos muy grandes cuando caigo en cuenta de lo que ha dicho, de lo que yo he dado a entender sin darme cuenta. 

— ¡No! No es eso Siwon. 

— Olvídalo. -  suspira hondo. — Solo quería que lo supieras por mí. Y decirte que lo nuestro ha terminado. 

Apenas dijo esas palabras, se dio la vuelta y se fue. 

Mi corazón está deshecho. Aunque sabía que ésto iba a pasar tarde o temprano,  no pude evitar soñar con un “para siempre” con él. En una linda casa, con un gato y dos perros, mientras envejecemos juntos. 

Pude ver lugares bonitos

Pude imaginarlos contigo

Hubiеra caminado descalzo con frío

Si hubieras querido

— ¿Vas a ir? - Ryeowook me pregunta mientras me saca de mis pensamientos. 

— No lo sé. - contesto mientras observo el sobre blanco con dos iniciales grabadas. 

— Todos entenderíamos si no lo hicieras. - Wook me dice mientras pone una mano sobre la mía. 

Ryeowook ha sido el encargado de traerme la invitación a la boda de Siwon. Wook, es mi mejor amigo, y como pareja de uno de los mejores amigos de Siwon, aún me mantiene informado sobre lo que ocurre con él… Hoy, después de tan solo unos meses, me ha traído este sobre que parece tener vida propia y me dice que definitivamente, él se ha ido. 

— No puedo creer que esté haciendo ésto. Siwon te ama, no entiendo… - Wook dice. — Eran perfectos juntos. 

— No lo éramos. - contesto. 

— Claro que sí. Te tenía tanta envidia, siempre tan mimado. - suspira — Ojalá Yeye fuera más cariñoso. - volteo a verlo, sintiendo ahora yo envidia de él. 

— Yeye te adora. - le digo, y Wook sonríe. 

— Lo sé. 

Suspiro hondo. Quiero superar ésto, y quiero que él también, que lo nuestro quede como el pasado, un pasado bonito, y que los dos tal vez, podamos ser amigos…

— Voy a ir. - le digo, seguro de poder hacerlo.

Fuimos la envidia de tantos

Ahora envidio a quienes nos miraron

Pudo contigo, pudo conmigo

Ninguno fue capaz de mantenerse vivo

Somos más pasado que futuro

No puedo romper solo este maldito muro.

No podemos ser amigos. No después de toda nuestra historia. No después de nuestro final…

Camino de prisa por la acera, sin voltear atrás, si lo hago, no sé de que sería capaz, tal vez de entrar  e interrumpir esa boda. De arrodillarme ante él y pedirle que no me deje, que me ame a mí, y que huyamos juntos. 

Dejo de caminar cuando siento que alguien pone su mano sobre mi espalda. Mi corazón se acelera. No quiero voltear, no quiero…

— Heechul. 

Cierro los ojos cuando escucho la voz de la persona que me ha detenido. Una lágrima rueda por mi mejilla. 

— ¿Qué haces aquí? - me giro a ver a mi amigo. 

— Seguirte. - hace un puchero. — Yo tampoco quiero estar ahí. Eso es un circo. - sonrío ante sus palabras de lealtad. 

— Gracias Wookie. - se encoge de hombros. 

— Soy tu amigo. - contesta. — ¿Quieres tomar unos tragos? - pregunta. — Yeye trajo el auto y puede llevarnos a donde quieras. - me dice  mientras señala a un lado. 

Yesung me saluda  desde el auto estacionado, esperando a que subamos. Sonrío y suspiro hondo. Es bueno tener amigos...

— De acuerdo. - contesto. 

Volteo a ver la iglesia. Nadie más ha salido, todo sigue igual. Y aunque es una desilusión, al mismo  tiempo es un alivio. Ha seguido con su vida, y yo tendré que hacer lo mismo...

Pude ver lugares bonitos

Pude imaginarlos contigo

Hubiеra caminado descalzo con frío

Si hubieras querido.

FIN