Alma Enamorada... Capitulo Final

Mingyu (POV)

— No quiero olvidarme de todo lo que ha pasado. No quiero olvidarme de ti…- Wonu murmura. 

Escucharlo decir eso, de esta forma, verlo tan vulnerable me hace querer tocarlo. Me acerco y extiendo mi mano. Cada vez es más difícil lograr el contacto, me pregunto si es porque hemos descubierto parte de su historia. 

Mi corazón late muy rápido, estoy nervioso. No sé si voy a poder tocarlo. Bajo mi mano sobre su mejilla y… no puedo evitar sonreír. 

— Pude tocarte de nuevo… - le digo. 

Siento un leve cosquilleo en mi mano. Wonu hace un leve puchero. Se ven tan lindo, y me dan ganas en verdad de abrazarlo, de tocarlo, de… besarlo.

Sin darme cuenta, acerco mi rostro al suyo. Sé lo que busco. Sé lo que quiero en éste momento: Un beso. Y es lo que hago. Me inclino lo suficiente para rozar mis labios con los suyos. Suspiro al sentir ese leve cosquilleo, y sé que mis labios han podido tocar los suyos. Es sólo un leve beso. Pero es suficiente. 

Me alejo. Observo su rostro totalmente sonrojado, apenado. No sé lo que vaya a pasar después, pero en estos momentos, estoy seguro de lo que siento y no me arrepiento de éste beso. 

— Wonu. - llamo su atención. — ¿Quieres tener una cita conmigo? 

Wonu abre los ojos muy amplio, demasiado sorprendido ante mis palabras. 

— ¿Una cita? - pregunta aún sin creerlo. 

— Sí. - sonrío. 

— Y-yo… nunca he tenido una cita…- murmura. 

Y esas palabras hacen que mi pecho se sienta lleno. Demasiado feliz de saber que puedo ser su primera cita, y que ese beso que acabo de darle pudo haber sido su primer beso también, y que yo tendré ese recuerdo, y que si Wonu al despertar se olvida de todo, tal vez habrá valido la pena un poco. 

— Entonces, ¿vamos? - le vuelvo a preguntar. Wonu sonríe. 

— ¡Sí! - contesta entusiasmado. — ¿Sabes? - se acerca a mí y toma mi mano cuando se la ofrezco. 

— Mmm…

— Ese…- susurra en mi oído. — fue mi primer beso. - volteo a verlo con una sonrisa.

— Lo sé…- contesto. 

— ¿Cómo lo supiste? - pregunta sorprendido. 

— Solo lo sé. - me encojo de hombros. 

Caminamos rumbo a la puerta, mientras él sigue preguntándome cosas. Yo no puedo dejar de sonreír al verlo entusiasmado. Se ha olvidado por completo de lo que vendrá después, y aunque me duele pensar que tal vez me olvide, me gusta verlo así. Su nariz se arruga tiernamente mientras habla y ríe. 

— ¿Se han olvidado de nosotros? - escucho detrás de mí a Joshua. 

— Sí, lo han hecho. ¿Qué tal si aprovechamos el tiempo tu y yo? - Jeonghan le contesta.

— ¡Hey! ¡Suéltame pervertido! - niego con la cabeza al escucharlos de nuevo coquetear. 

— No vengan con nosotros - les digo sin voltear a verlos. — Wonu y yo iremos solos. 

Wonu sonríe. Cierro la puerta de mi departamento, dejando a esos dos ahí. Quiero llevar a Wonu a un lugar en donde pueda verlo reír; el tiempo que estuvo conmigo, casi siempre estuvo preocupado o triste. He descubierto, que me gusta más su sonrisa, así que vamos a un parque de diversiones. 

Al final del día, será tiempo de decirnos adiós. Creo saber bien, en qué hospital está internado, y no quiero postergar más el momento, no es bueno para él. 

Wonu (POV)

— ¡Wow! ¡El parque de diversiones! - digo feliz en cuanto llegamos. — Las únicas veces que he venido, ha sido con mis padres. 

— Entonces, ¿empiezas a recordarlos? - Mingyu me pregunta. 

No puedo evitarlo y bajo la cabeza mientras asiento. Sí, desde que supe mi nombre completo, los recuerdos han empezado a regresar. Principalmente los rostros de mis padres, y momentos felices con ellos. 

— Sí, los recuerdo. - suspiro hondo. 

— Eso es bueno. - Mingyu me dice. — Ellos deben estar preocupados por no saber de ti. 

— Lo sé…- de nuevo asiento, y eso me duele, pero también quiero estar con Mingyu.

— Bueno. - intenta disipar el ambiente triste que de pronto se formó. — Pero por el momento, vamos a divertirnos. 

— ¡Sí! - sonrío amplio y grito feliz, antes de empezar a correr hacia los juegos. 

Hay tantos juegos a los que quiero subirme con él. ¿Por dónde empezar? Muerdo mi labio inferior al ver la Noria. Volteo a ver a Mingyu. ¿Sería extraño que un chico suba solo a la Noria? Es decir, nadie puede verme, sólo verán a Mingyu… no, será mejor que no… 

— Si quieres subir a la Noria, vamos a la Noria. - Mingyu me dice. 

— ¿En serio? ¿No tienes miedo de que la gente te vea extraño? - sonríe. 

— En estos momentos, no estoy prestando atención de la gente a mí alrededor. - me dice. — Solo hay una persona que me interesa. 

De nuevo no puedo evitarlo. Bajo la mirada, siento mi rostro realmente caliente. 

— Vamos. - Mingyu extiende su mano. 

Volteo a ver a nuestro alrededor. Mucha gente se le ha quedado viendo extrañados, y empiezan a evitarlo. Pero Mingyu simplemente sigue esperando, sonriéndome. Suspiro hondo, y tomo su mano. 

La vista de la ciudad es realmente hermosa al atardecer desde lo alto de la Noria. 

— Es hermoso. - susurro. — Quiero guardar éste momento en mi memoria. No quiero olvidarlo. 

En verdad quiero llorar. Tengo tanto miedo. Sé que mis padres me aman tanto como yo a ellos, y sé que mi vida no ha sido mala, y que vendrán cosas geniales. Pero estos días junto a Mingyu… no quiero olvidarlos. 

— Y yo no quiero que olvides. - Mingyu de pronto dice. — Pero si es necesario para que tu vivas… entonces, que así sea. - aprieto los labios. 

— ¿Y si no es así? - pregunto. En realidad, mi mayor miedo, es que yo realmente no despierte. — ¿Qué pasará si tengo que irme al igual que lo hizo Seung Kwan? - Mingyu niega. 

— No. Tú vas a vivir. - toma una de mis manos. Sonrío feliz al ver que aún es capaz de tocarme. 

Sonrío levemente. Mingyu está siendo muy optimista. Cierro los ojos. Quiero ser igual que él, quiero creer que todo saldrá bien. 

— Sé en qué hospital estas. - abro los ojos cuando lo escucho. 

— ¿Qué? - volteo a verlo. 

— El mismo en el que fui atendido. - frunzo el ceño. 

— ¿Cómo lo sabes? - ladeo la cabeza. 

— ¿Recuerdas esa vez que me acompañaste? No pudiste entrar porque entre más te acercabas, más empezabas a desaparecer. - niega con la cabeza. — Probablemente, habrías podido regresar a tu cuerpo si hubieras entrado. 

Tengo la boca abierta. Estoy sorprendido. Sí, lo recuerdo, ese día fue muy extraño, entre más me acercaba, sentí que algo me llamaba, pero no entendí que se trataba de eso. 

No me arrepiento. Pude pasar más días con Mingyu. 

— Llamaré a Seungcheol- Mingyu me dice. — Está saliendo con el enfermero que me atendió, quizá él pueda ayudarnos. - asiento con la cabeza mientras lo escucho. — necesitamos saber si hay un chico de tu edad internado, y si podemos ir a verlo. 

Inclino mi cabeza hasta que ésta toca su hombro. Suspiro hondo. Mingyu lleva su mano a mi cabeza para acariciarme, y eso me hace sonreír. Mi corazón late rápido. Quiero estar así por siempre… 

Mingyu (POV) 

Bajamos del taxi que nos ha traído hasta el hospital. En éste punto, al igual que Wonu, yo tampoco quiero estar aquí, pero es necesario. Además, Seungcheol y ese enfermero, Jihoon, están esperando por nosotros en la puerta. 

— ¿Todo el tiempo ha estado aquí? - Jeonghan pregunta, apareciendo junto a nosotros. 

— Así parece. - contesto. — Aún necesitamos verlo. 

— Todo saldrá bien Wonu. — Joshua se acerca a Wonu. — Es lo mejor. 

Wonu no dice nada. No ha dicho nada desde que salimos del parque de diversiones rumbo al hospital. 

— ¡Hey! Mingyu. - Seungcheol se acerca a saludarme. — ¿Por qué la insistencia de que sea hoy? - me pregunta. — Jihoon ha tenido que pasar por muchos problemas para dejarlos pasar. 

— He tenido que decir que eres alguien que cree que es tu familiar. - Jihoon me dice. 

— Gracias Jihoon. En verdad no tienes idea de lo mucho que significa esto. 

— ¿En verdad lo conoces? - Seungcheol me pregunta. — Es un chico de preparatoria, ¿de dónde lo conoces? 

— Es una historia muy larga. - le digo. — Algún día te la contaré toda. 

— De acuerdo. 

— Es por aquí. - Jihoon nos guía. — El chico tiene 17 años, o eso creemos porque estaba usando un uniforme escolar común. 

Volteo a ver a Wonu. Aprieto los labios al ver que empieza a desaparecer mientras camina junto a mí. Respiro hondo. 

— El pobre tuvo un accidente mientras conducía su bicicleta. - Jihoon hace una pausa. — Esto es loco, pero al parecer la ropa interior de alguien voló, y para su mala suerte, cubrió su rostro haciendo que cruzara una avenida sin fijarse. - abro los ojos muy amplio. — Un carro lo golpeó, y él cayó golpeándose la cabeza. 

“La ropa interior de alguien”

¡Oh diablos! 

Volteo a ver a Wonu de nuevo. ¡Es por eso que apareció en mi departamento! ¡Yo fui el culpable! 

— Lo siento mucho Wonu,- le digo. 

— ¿Huh? - tanto Seungcheol, Jihoon, como Wonu dicen al mismo tiempo. 

— Fue mi culpa. - continúo. — Era mi ropa. Así tuve el accidente yo. - le digo. — Intentando evitar que volaran. 

— ¡Oh Dios! ¡Amigo! - Seungcheol dice. — ¡Eso es tener mala suerte! 

Wonu no dice nada, simplemente abre la boca sorprendido ante lo que acabo de decirle. 

— Aquí es. - Jihoon nos dice. — Es la habitación del chico. - abre la puerta para dejarnos entrar. 

Mi corazón está latiendo muy rápido. Dudo por un momento, pero finalmente entro, acercándome a la cama. Puedo ver el cuerpo de un chico, con tubos y máquinas conectadas. 

Paso saliva nervioso mientras me acerco más, solo lo suficiente para poder ver su rostro y… 

— Jeon Wonwoo - digo al verlo ahí, recostado. 

— Soy yo…- escucho a Wonu, me giro solo para ver como finalmente desaparece. 

Extiendo mi mano intentando alcanzarlo, pero no lo logro. Se ha ido. 

— ¿Es él? - Jihoon me pregunta. 

— Sí…- contesto sin dejar de ver el lugar en donde antes estaba él. — Jeon Wonwoo. - repito su nombre. 

— ¡Eso es genial! Por fin tenemos un nombre. — Jihoon dice mientras toma el expediente para anotarlo. — ¿Sabes dónde localizar a su familia? - asiento con la cabeza. 

— Sí, él me lo dijo. - de nuevo contesto. 

Frunzo el ceño. Espera un momento. Si él ya no está aquí… volteo a ver la cama… ¿por qué no ha despertado? 

— ¿Por qué no despierta? - pregunto. 

— Oh, el golpe en la cabeza fue fuerte. — Jihoon empieza a explicarme, pero en realidad no ha sido a él a quien le pregunte… 

— Debe estar confundido. - Joshua contesta, mientras Jihoon habla a lo lejos. — Tal vez necesite un poco de tiempo. Pero estará bien. 

— Sí. Él estará bien. - Jeonghan confirma, volteo a verlo, está cerca de Wonu, observándolo. — Está en donde debe estar, ahora solo es cuestión de tiempo. 

Tengo un nudo en el pecho. Se ve tan delicado ahí acostado, conectado a esas máquinas. Me acerco para pasar mi mano por su cabeza. Sonrío al sentir por fin el calor de su piel. Es tan lindo… 

Wonu (POV)

— ¡No quiero! ¡No quiero! 

Grito desesperado intentando regresar. Puedo escuchar a Mingyu, pero no puedo verlo más. Todo está oscuro. 

De pronto, solo una pequeña luz es posible ver. Me acerco a ella, y poco a poco todo el lugar empieza a iluminarse. Es un simple cuarto blanco. Me hace sentir solo. 

— Mingyu…- lloriqueo. 

No me gusta este lugar. Estoy solo. Solo escucho voces. 

— No te asustes. - volteo cuando escucho la voz de Joshua. 

— ¡Joshua! 

— Lindura, tienes que tranquilizarte. - Jeonghan también está aquí. 

— Por favor. - me acerco a ellos. - Por favor, déjenme regresar. Quiero estar con Mingyu. 

Joshua niega con la cabeza, y eso me hace querer llorar de nuevo. ¿Por qué no puedo? 

— Tus padres están esperándote. - Joshua me dice. — Ellos han sufrido mucho, y están esperando por tú. - aprieto mis labios. 

Sí. Mis padres. Quiero verlos…

— Tienes muchas cosas que experimentar Wonu. Éste es el camino correcto para ti. Es nuestra misión, ayudarte a encontrarlo, y es éste. ¿No quieres ver de nuevo a tus padres? 

— Sí, quiero… pero, ¿y Mingyu? no quiero olvidarme de él, ¿podré recordarlo? por favor...

— Wonu, querido. — Jeonghan se acerca a mí. — Tus recuerdos podrán ser borrados, pero el corazón no olvida Wonu…- me dice. 

“El corazón no olvida”

De pronto todo se pone oscuro de nuevo. Mi corazón se acelera. Estoy asustado. ¿Qué está pasando? 

“El corazón no olvida”

Esas palabras vuelven a sonar en mi cabeza. 

Cierro los ojos pensando en lo que esas palabras significan. Abro los ojos, y todo a mí alrededor es muy extraño. 

¿En dónde estoy? 

¿Qué es ese pitido? 

Quiero levantarme, pero no puedo. Hay agujas en mis brazos, y algo en mi boca. ¿Estoy en un hospital? ¿Por qué? ¿Qué pasado? 

Estoy asustado. Volteo a ver a mí alrededor con los ojos. Mi corazón late muy rápido, hasta que… una mano cálida sujeta la mía. 

“El corazón no olvida”

Volteo a ver a quien esté tomando mi mano. Es un chico alto, moreno. 

— Hola. - me dice mientras sonríe. 

No sé quién es. Pero su mano sobre la mía me ha hecho tranquilizarme. Y su sonrisa… su sonrisa es realmente hermosa. 

— No sabes quién soy. - me dice. — Pero yo a ti sí te conozco. Mi nombre es Mingyu. 

De pronto un doctor entra a la habitación, seguido de un enfermero. El chico, Mingyu, empieza a dejar mi mano, pero yo, no sé porque, cierro mi mano para no dejarlo ir. No quiero que se vaya. Es extraño, pero no quiero que se aleje…

“El corazón no olvida”

— No te preocupes. No voy a irme…- el chico dice dando unas palmadas a mi mano, mientras se aleja para dejar que los doctores hagan su trabajo. 

¿Por qué me siento así? Es la primera vez que veo a éste chico, y mi corazón está latiendo muy rápido. Tengo ganas de llorar al verlo, quisiera abrazarlo, y es realmente loco, porque es un desconocido. 

Después de que los doctores me examinaron y quitaron el tubo de mi boca. Mis padres llegaron, y me explicaron quién era Mingyu; al parecer su ropa ocasionó mi accidente, del cual ya no me acuerdo muy bien, y extrañamente, también él fue quien me identificó, y eso hizo que mis padres pudieran dar conmigo, después de un mes de estarme buscando. 

Ha pasado un mes desde que mis padres me localizaron, y me han dicho que él, Mingyu, ha venido a verme todos los días. Debe ser la culpa… aunque no me quejo, es demasiado guapo, y debo haber sido la envidia de todos los enfermeros. 

Mis mejillas no dejan de sonrojarse cada vez que él viene. Pero también siento, como si lo conociera demasiado bien… me gusta, me gusta mucho. 

“El corazón no olvida”

FIN