Refugio


Título del Songfic: Refugio
Parejas: SiChul
Tipo: Yaoi
Género: slash, fluff, romance, OTP, POV, AU
Clasificación: +18
Advertencias: Este songfic es un proyecto para la página “Me Fui a Dormir Pensando en el SiChul” por el día SiChul del 15 de diciembre del 2018. Cuarto año festejando a nuestra OTP.


— Está bien, tomemos un descanso ahora. - el mono dice mientras se gira a atrapar en un abrazo a mi precioso pez.

Niego con la cabeza cuando veo a Donghae intentar escapar, o más bien, fingir que quiere escapar, porque en realidad ha estado esperando toda la mañana para poder abrazar a Hyukjae.

Suspiro hondo. Seco el sudor con la toalla que cuelga de mi cuello. Hago una mueca al sentir como mi rodilla duele. Estoy cansado. Cojeando un poco camino hasta poder sentarme en una de las bancas junto al espejo del salón de ensayos.

Como quisiera poder estar con ellos en todas las presentaciones, pero no puedo, mis piernas no me lo permiten. De pronto empiezo a sentirme triste. Masajeo un poco mis piernas mientras sigo observando a mis compañeros de grupo, a mis hermanos.

No puedo evitar sonreír amplio cuando veo a Yeye frente al espejo, haciendo sus típicos movimientos de baile, detrás de él, un muy animado Wookie está riendose de él.

Un celular comienza a sonar, y veo a nuestro líder, Teukie correr hasta su mochila para sacar su móvil. Lo veo apresurarse a contestar y salir del salón de ensayos, justo en el momento en que él entra.

De pronto todo a mi alrededor deja de importar. Apenas entra, es como si el mundo a mi alrededor no importara o se detuviera. Sonríe cuando me ve sentado en el banco, pero cuando nota que mis manos masajean mis piernas, frunce el ceño.

Voltea a ver a su alrededor. Suspiro al ver su magnífico perfil. Su mandíbula marcada, su barba a medio crecer, tal y como me  gusta, su cuello masculino… no puedo despegar la vista de él. Frunzo el ceño cuando lo veo salir del salón de ensayos.


Hago una mueca molesto. ¿A dónde ha ido? Estoy enojado porque no ha venido en toda la mañana al ensayo debido a que ha tenido otros compromisos, y ahora simplemente sale sin ni siquiera acercarse.

Escucho a mi preciado pez reír fuerte y eso me hace girar mi cabeza, con toda mi atención en la forma en que ese horrible mono está haciéndole cosquillas. Donghae está tirado en el piso boca arriba, mientras que Hyukjae se ha sentado sobre sus caderas para impedir que se levante. Sus manos están buscando la manera de seguir haciéndolo reír.

Sonrío. Esos dos jamás disimulan.

De nuevo suspiro hondo, y doy un brinco cuando siento algo frío sobre mi rodilla. Una botella de agua helada.

Observo la mano que la sostiene. Sonrió cuando la reconozco. ¿Cómo no reconocer esas manos grandes, fuertes y varoniles?

Levanto la  mirada y me encuentro con él.

— Siwon…- su sonrisa me abruma, es tan radiante como el sol.
— Deberías haber parado cuando empezaste  a sentirte cansado - me dice.
— No estoy cansado- le miento. — solo estaba masajeando para prevenir…
— Sí, claro. - levanta una ceja — a mi no me mientas, te conozco.

Bajo la mirada. Sí, Siwon me conoce demasiado. Muerdo mi labio inferior y sonrío. Observo cómo sus manos ruedan la botella fría por mis rodillas y piernas. Recargo mi espalda en la pared y suspiro aliviado. Me siento bien, cuidado, amado.

— Gracias…- murmuro.
— No tienes porque darmelas. - Siwon contesta. — Yo siempre haré estas cosas por tí. - abro los ojos para verlo.
— Por eso te amo…- le digo mientras extiendo mi mano para tocar su rostro.
— Y yo a tí. — Siwon detiene mi mano sobre su mejilla.

No hay nada mejor que desearte
Eres como el sol caliente, yo soy marte
Nunca es suficiente, nunca sé corresponderte
Pero no hay nada más bello que intentarlo mil veces
Soy desordenado cuando quiero
No recogeré los besos que dejé anoche en tu cuello
Somos un desastre pero es cierto, nos queremos
Si pasas por mi lado aún se congela el tiempo
Quién me iba a decir a mí que todo esto existiría
Déjame ser tu refugio, déjame que yo te ayudo
Aguantémonos la vida, te recuerdo si lo olvidas
Que hemos crecido peleando y sin quererlo nos gustamos
Cuántas cosas han pasado y ya no hay miedo de decir
Te amo
Te amo

Gruño molesto cuando la alarma de mi celular empieza a sonar. Alargo la mano buscando mi móvil, pero éste ya no está en el lugar de siempre y eso me obliga a abrir los ojos un poco.

— Ya levántate princesa, se te hará tarde.- Siwon me dice mientras agita mi celular en su mano, en la otra lleva una taza de café.
— Lo puse una hora antes…- le digo.

Siwon le da un sorbo a su café, para luego decir tranquilamente…

— Es la quinta vez que suena…- me siento de golpe en la cama cuando lo escucho decir eso.
— ¿Por qué no me despertaste antes? - le digo preocupado.

Siwon sonríe y deja mi celular en la cama. Se inclina un poco para darme un beso en los labios, pero se detiene a centímetros.

— Ve a lavarte los dientes. - arrugo la nariz molesto.
— Primero un beso - hago un pico con mis labios, Siwon niega con la cabeza.
— Princesa caprichosa…- murmura antes de darme un beso rápido.

Sonrío satisfecho y vuelvo a recostarme en la cama. Levanto las sábanas y me tapo hasta la cabeza con la intención de seguir durmiendo.

— ¡Heechul! -  Siwon me llama. Yo simplemente sonrío.

Lo escucho dejar su café en el buró, para después subir a la cama.

— Princesa, no seas flojo…- empieza a decirme mientras sus manos comienzan a hacerme cosquillas.
— ¡No!- grito y comienzo a reírme.
— Anda, se te hará tarde, ya te he preparado el desayuno - me dice sin dejar de hacerme cosquillas.
— ¡Ya! ¡Sí! ¡Lo que tu digas! - finalmente deja de hacerme cosquillas.

Me da unas nalgadas cariñosas, y se levanta de la cama. De nuevo me da un beso en los labios.

— Tengo que irme. Te amo.
— Yo también. - contesto con una sonrisa.

Siwon sale de la habitación, y yo suspiro al ver su espalda. Aún no puedo creer que estemos juntos. Después de tantos años de conocernos, de tratarnos como hermanos, de divertirnos juntos, de pelear…

Volteo a ver el buró. Sonrío al ver que el café está a la mitad. Tomo la taza y la llevo a mis labios para tomar un sorbo. Suspiro.

— Siempre sabe delicioso…- murmuro.

Dejas que me enfade como un niño
Sabes que no voy a irme, sólo soy feliz contigo
Tú tienes lo tuyo, sé que escondes tus manías
Me gusta cuando bailas, sin saber que alguien te mira
Pones cinco veces las alarmas
Y vuelves a dormirte, no te importa si te llaman
Dejas el café a medias y siempre lo termino
Y cuando dejas un recado, yo siempre me olvido
Quién te iba a decir a ti, que todo esto ocurriría
Déjame ser tu refugio, déjame que yo te ayudo
Aguantémonos la vida, te recuerdo si lo olvidas
Que hemos crecido peleando y sin quererlo nos gustamos
Cuántas cosas han pasado y ya no hay miedo de decir
Te Amo
Te Amo

La puerta del camerino de pronto se abre. Volteo a ver hacia ahí, mis ojos arden con ganas de llorar. Aprieto los labios mientras masajeo mi pierna. Y apenas lo veo parado en la puerta hago un puchero.

Siwon entra y cierra la puerta. Puedo ver la preocupación en su rostro, rápido camina hasta donde estoy y del bolsillo de su chaqueta, saca un frasco de pastillas. Con cuidado quita la tapa y saca una pastilla.

— Por ésta vez, sólo una, ¿de acuerdo? - asiento con la cabeza mientra tomo la pastilla y lo pongo en mi boca. Siwon abre una botella de agua y me la da. — Vamos a casa.
— Sí…- contesto aún con un puchero en los labios.

Estoy molesto, pero también desanimado. Mientras estaba grabando un programa, el dolor en mi pierna comenzó a empeorar al punto que no pude continuar. Me he encerrado en el camerino sin querer salir, y el manager ha tenido que llamar a Siwon.

— Quita esa cara - Siwon me dice mientras me levanta del sillón en el que estoy y me carga. — Solo vas a descansar un día de las grabaciones, no es tan grave.
— Si lo es…- contesto emberrinchado — No es profesional, yo…
— Basta… - Siwon me calla con un beso — Deja de exigirte tanto, no eres un robot, tus petals aún te quieren y nunca van a abandonarte, - sonrío—  al igual que yo…- murmura en mi oído.

Suspiro hondo, enredo mis brazos alrededor de su cuello y recargo mi cabeza en su hombro. De nuevo me siento seguro.

Y aunque sé que seguramente nos verán, y que a pesar de sus lentes oscuros sabrán que es él, cierro los ojos y disfruto de estar en sus brazos… mi refugio.

— Te amo…- susurro.
— Lo sé…- abro los ojos, me retiro un poco de él y le doy un golpe en el hombro.
— No se supone que contestes eso…- hago un puchero.

Siwon continúa caminando rumbo al estacionamiento, sin importarle que más gente nos vea. Ríe ante mi reacción. Por un momento se detiene para verme a los ojos.

— ¿Cuantas veces necesitas que te lo diga? - me pregunta.
— Muchas…- contesto.

De nuevo una sonrisa aparece en sus labios.

— Te amo…- susurra.



Cuántas cosas han pasado y ya no hay miedo de decir
Te Amo
Te Amo

Tu Refugio - Pablo Alborán

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2 Comentarios

  1. Un songfic perfecto, para una las OTP clásica y perfecta... me encantó!!

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  2. ayyy ya me enamore demasiado de estos dos, bueno, mas quiero decir. Amo tanto esta pareja los caprichos de la chula y siwi tan tierno y bello que el hace todos los gustos

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